sábado, 30 de abril de 2011

LITERATURA PRECOLOMBINA

Objetivos del proyecto.
Utilizar las herramientas que nos provee el concepto de Nube, documento en lineas y blogs, para dar a conocer la Literatura Precolombina. De esta manera se ofrece un entorno alternativo al tradicional para la presentación de trabajos, al mismo tiempo, crear material de estudio para las demás disciplinas tanto para sexto como para los demás cursos del nivel medio.

Sobre las culturas precolombinas:
  1. Mayas
  2. Incas
  3. Aztecas
  4. Diaguitas
  5. Guaraníes 
Destacas los siguientes aspectos:
  • Zona geográfica donde habitaban.
  • Vestimenta.
  • Desarrollo tecnológico.
  • Arquitectura.
  • Forma de escritura.
  • Producción literaria.

lunes, 18 de abril de 2011

GUARANÍES

Ubicación geográfica.
Los guaraníes son un grupo de pueblos sudamericanos, cuyos habitantes viven en el noreste de Argentina (Corrientes, Misiones, Entre Ríos y parte de las provincias de Chaco yFormosa), sur y suroeste de Brasil (RS, SC, Paraná y Mato Grosso del Sur), la mayor parte de Paraguay, sureste de Bolivia; en cuanto al estado del Uruguay aunque su nombre es de origen guaraní en su actual territorio no vivieron guaraníes sino pámpidos como los charrúas, chanás, arachanes, tapés etc. que entre los siglos XV y XVIII sufrieron un gran influjo lingüístico desde el idioma guaraní.


Vestimenta.

Los hombres usaban un taparrabos de algodón o un chiripá que consistía en una tela que envolvía la cintura y llegaba hasta las rodillas. En el sur que el clima es más frío podían abrigarse con una capa corpa de algodón o de piel. Las mujeres usaban el tipoy o tupai, que consistía en una túnica de algodón sujeta sobre el hombro. Todas sus piezas podían tener diseños pintandos de guardas geométricas. Se adornaban los jefes con pectorales de bronce o plata, capas de plumas de colores, tocados y brazaletes de plumas en sus ceremonias. Completaban los adornos collares realizados en algodón y plumas o semillas. Los collares usados por las mujeres podían ser de semillas coloridas, de huesos, de vértebras de pescaso, de valvas de caracol o plumas. Los anillos eran confeccionados con cáscaras de frutos de palmera. Los jóvenes próximos al matrimonio se colocaban flores en el cabello. Era también muy habitual pintarse el cuerpo con rayas y puntos de colores según la ocasión.


Desarrollo tecnológico.

Se dedicaban a la caza, la pesca y la recolección de plantas comestibles, pero llegaron a ser grandes agricultores; lo demuestra el hecho de que obtuvieran diversas plantas tropicales para su cultivo y domesticaran animales como patos, gallináceas, loros y papagayos. Sus armas eran el mazo, el arco y las flechas. Algunas formas de expresión artística fueron la alfarería pintada, la cestería y los tejidos. Dormían en hamacas tejidas en sencillos telares verticales.

Arquitectura.


El “oga”, vivienda común, que albergaba de cincuenta a doscientas personas, estaba construido con troncos de árboles y techos de palmeras. Hamacas y catres eran sus camas. Cuando se analiza el tema de la arquitectura durante las misiones, se encuentra en su desarrollo tres etapas—la nutrida con elementos naturales del medio, la misionera, donde predomina la piedra, y la europea injertada, naciente antes de la expulsión— las primeras ciudades jesuíticas fueron mejorando, pero no creando, a las ya existentes ciudades guaraníes.
Los primeros cronistas españoles, admiraron y elogiaron las magnificas ubicaciones de las ciudades guaraníticas, y tanto es así que los propios conquistadores las tomaron como asiento para sus fundaciones, adoptando la práctica de la empalizada para su defensa.

Escritura.
Antes de la conquista española de América en el siglo XV, el pueblo guaraní no tenía un sistema de escritura. Los primeros textos en guaraní fueron escritos por misioneros jesuitas, que usaron el alfabeto latino.
El nombre guaraní del alfabeto achegety es un neologismo formado con a-che-ge(el nombre de las tres primeras letras) y ty que significa "agrupación", "conjunto".

Producción literaria.




La Creación "Jeguerojera" (Creencia Mbyá Guaraní)

Para todo hombre religioso, el mundo es a la vez un organismo real, vivo y sagrado; una creación de los Dioses. La rica y compleja cosmogonía guaraní se despliega en cuatro etapas creadoras...
Primera etapa: Ñande Rú se crea a sí mismo en medio de las tinieblas primigenias. De esta primera creación se desprende la concepción cíclica del tiempo y del espacio, característica de toda cultura prehistórica. Cada año termina con el invierno y resurge con la primavera, cuando florece el lapacho.
•En la Segunda etapa se crea el fundamento del lenguaje humano, la palabra creadora en los siguientes órdenes: de la comunidad y de la comunicación con la divinidad. El lenguaje es en esencia el alma de los hombres.
Tercera etapa: como en el anterior, Ñamandú crea cuatro Dioses que ayudarán en la creación del mundo en distintos ámbitos:
- A Ñamandú corazón grande corresponden las palabras.
- A Karai, el fuego.
- A Jakaira, la bruma o neblina vivificante.
- A Tupá, el agua, el mar, la lluvia, el trueno, el rayo, etc.
Cada uno de estos Dioses tiene su consorte.
•En la Cuarta etapa se crea la primera Tierra, el hombre y la mujer, los animales y las plantas. En el centro una palmera y otra en sus cuatro costados (puntos cardinales), sosteniendo el espacio y el tiempo. También se crea el firmamento que descansa sobre cuatro columnas. Estas primeras Tierras, perfectas, sin males y sin tiempos, es la que comparten hombres y Dioses, una vez que el Creador se ha retirado a las tinieblas. Pero entonces también ocurre la caída de estas primeras Tierras, por la acción imperfecta del hombre: el diluvio la hace desaparecer. En adelante se crea la Nueva Tierra que es imperfecta, donde el hombre ha perdido su condición divina y debe aceptar su condición de simple mortal. Así, la búsqueda de la "Tierra sin Mal", es la búsqueda de la inmortalidad perdida. Situación que se quiere recuperar aquí en la Tierra, o después de la Tierra.

 A partir de estas ricas y complejas cosmogonías que se creían, los guaraníes crearon sus producciones literarias. Estas hacían alusión a temas de la tierra; como la leyenda Del Ceibo,Garganta del fuego, La primera tierra. Temas referidos a los hombres, las mujeres, en sus sentimientos, su belleza, sus amores. Como ejemplo podemos encontrar: la leyenda de La mandioca, El sol rojo. También se encontraban las leyendas que trataban sobre dioses como la leyenda las llamas y la neblina del poder creador, La tijereta.

LEYENDA DEL CEIBO
Cuenta la leyenda que en las riberas del Paraná, vivía una indiecita fea, de rasgos toscos, llamada Anahí. Era fea, pero en las tardecitas veraniegas deleitaba a toda la gente de su tribu guaraní con sus canciones inspiradas en sus dioses y el amor a la tierra de la que eran dueños... Pero llegaron los invasores, esos valientes, atrevidos y aguerridos seres de piel blanca, que arrasaron las tribus y les arrebataron las tierras, los ídolos, y su libertad.
Anahí fue llevada cautiva junto con otros indígenas. Pasó muchos días llorando y muchas noches en vigilia, hasta que un día en que el sueño venció a su centinela, la indiecita logró escapar, pero al hacerlo, el centinela despertó, y ella, para lograr su objetivo, hundió un puñal en el pecho de su guardián, y huyó rápidamente a la selva.
El grito del moribundo carcelero, despertó a los otros españoles, que salieron en una persecución que se convirtió en cacería de la pobre Anahí, quien al rato, fue alcanzada por los conquistadores. Éstos, en venganza por la muerte del guardián, le impusieron como castigo la muerte en la hoguera.
La ataron a un árbol e iniciaron el fuego, que parecía no querer alargar sus llamas hacia la doncella indígena, que sin murmurar palabra, sufría en silencio, con su cabeza inclinada hacia un costado. Y cuando el fuego comenzó a subir, Anahí se fue convirtiendo en árbol, identificándose con la planta en un asombroso milagro.
Al siguiente amanecer, los soldados se encontraron ante el espectáculo de un hermoso árbol de verdes hojas relucientes, y flores rojas aterciopeladas, que se mostraba en todo su esplendor, como el símbolo de valentía y fortaleza ante el sufrimiento.

Glosario:
-Ñande Ru: Padre Primero.
-Ñamandú: Padre Verdadero, Creador.
-Jakaira: Dios de la neblina purificante.
-Karai: El Dios del fuego
-Tupá: Dios del trueno, del relámpago, del agua y de la lluvia.
-Kuaa-ra-ra: Su significado es "poder creador de la sabiduría". Junto con las palabras tataendy y tatachina, que quieren decir respectivamente "llamas" o "manifestación visible de la divinidad" y "tenue neblina" o "neblina vivificante que infunde vitalidad a todos los seres.
-Los mbyá o mbya: son un pueblo guaraní que habita en la provincia de Misiones (Argentina), en los estados del sur del Brasil y en el este del Paraguay.

DIAGUITAS

Ubicación geográfica.
Habitaban los cerros y valles del noroeste de Argentina (NAO), en las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, La Rioja, Norte de San Juan, extremo noroeste de Córdoba (Argentina) y el Nore Chico de Chile, en los valles transversales de las regiones de Atacama y Coquimbo teniendo al oeste de los Andes como límite aproximado el río Choapa.


Vestimenta.
Del tipo de vestimenta que usaban los diaguitas,
se sabe que utilizaron el algodón y la lana de llama.
Restos arqueológicos han podido determinar que utilizaban
 collares y adornos de piedra de malaquita y de conchas.

Desarrollo tecnológico:
Los cultivos eran posibles gracias al alto desarrollo tecnológico que poseían  para la irritación de la tierra mediante acequias y canales artificiales.Practicaban la pintura, las danzas y la música. Sus instrumentos más conocidos fueron la corneta, el tambor y la flauta.Eran excelentes agricultores, sembraban con un palo de regular grosor que utilizaban para preparar la tierra donde depositaban las semillas. Cultivaban el maíz, la quínoa, la papa, el zapallo y los porotos. Además recolectaban frutos silvestres como algarroba, que almacenaban en contenedores construidos debajo de la tierra, y con la que elaboraban bebidas alcohólicas: aloja y chica, y una pasta seca o pan llamado : patay. Practicaban la caza y criaban llamas, de las cuales aprovechaban su lana, carne, cuero, leche; también les servían de transporte.

Arquitectura.
En las ciudades y poblados diaguitas y calchaquíes destacaban edificios particulares y públicos, estos últimos de carácter militar o religioso y otros, más rudimentarios, que
sirvieron de silos, almacenes y corrales. Esas poblaciones, que en tiempos de la conquista fueron llamados “pueblos viejos”, estuvieron situados generalmente, al pie de los cerros, no así sus fortalezas, los “pucarás”, que fueron edificadas en la parte alta. Hacia ellos se dirigían que los habitantes de las primeras en tiempos de guerra ya que disponían de murallas y defensas adecuadas.


Escritura.
Lengua de las comunidades Diaguitas que habitaron el Noroeste argentino y el Norte Chico chileno. Algunas fuentes la mencionan como caca, kaka y chaka. También se han empleado las denominaciones caca-diaguita, o lengua calchaquí. Es una lengua extinta e inclasificada. A partir del ingreso del Inca Tupac Yupanqui hacia el año 1480 la influencia de las lenguas quechua y aymara se hizo cada vez más importante. Los españoles promovieron en un principio el uso del quechua como lengua general entre los grupos amerindios y en una segunda etapa la expansión del español, que terminó extinguiendo el kakán. Los misioneros españoles Alonso de Barzana y Pedro Añasco escribieron a mediados del siglo XVI, preceptos gramaticales, vocabularios y textos doctrinarios. Barzana expresaba que "es una lengua tan gutural que parece no se instituyó para salir de los labios". Otro sacerdote, Hernando de Torreblanca, hacia 1639, se esforzó por descifrar esta lengua, postuló la existencia varios dialectos que diferían principalmente en aspectos fónicos.

Producción literaria.

Las narraciones de las culturas diaguitas fueron transmitas de generación en generación, en forma oral,  tardaron muchos siglos en asentarse por escrito. Se conocen varias leyendas y poemas producidas por estos pueblos como el Poema de Gilgamesh y las leyendas de Chaya y Pujillay y de Los Pétalos de la Rodocrosia

El Poema de Gilgamesh:
Se considera como la obra literaria-religiosa más importante de la literatura acadia y la primera de las grandes epopeyas literarias de la humanidad. Se emplearon tablillas de arcilla y escritura cuneiforme lo cual favoreció su preservación.  La versión más completa preservada hasta la actualidad consta de doce tablillas. El poema plantea los grandes interrogantes humanos: el significado de la vida, la angustia ante la muerte y la búsqueda de la inmortalidad.
El poema trata sobre las aventuras del rey Gilgamesh, también conocido como Istubar, y su amigo Enkidu. Una de las tablillas relata un episodio muy parecido al de la Biblia sobre el diluvio. Las aventuras para matar al gigante Humbaba, el descenso a los infiernos y la relación entre dioses, semidioses (como el propio Gilgamesh) y mortales le dan un claro origen prehelenístico. El núcleo sentimental se encuentra en el duelo tras la muerte de Enkidu. Los críticos consideran que es la primera obra literaria que hace énfasis en la mortalidad e inmortalidad.

Leyenda de Chaya y Pujillay.

Cuenta la leyenda que Chaya era una muy bella jovencita india, que se enamoró perdidamente del Príncipe de la tribu: Pujllay, un joven alegre, pícaro y mujeriego que ignoró los requerimientos amorosos de la hermosa indiecita. Fue así como aquella, al no ser debidamente correspondida, se interno las montañas a llorar sus penas y desventuras amorosas, fue tan alto a llorar que se convirtió en nube. Desde entonces, solo retornar anualmente, hacia el mediado del verano, del brazo de la Diosa Luna (Quilla), en forma de rocío o fina lluvia. En tanto Pujllay sabiéndose culpable de la desaparición de la joven india, sintió remordimiento y procedió a buscarla por toda la montaña infructuosamente. Tiempo después, enterado el joven del regreso de la joven a la tribu con la luna de febrero, volvió el también al lugar para continuar la búsqueda pero fue inútil. Allí, la gente que festejaba la anhelada cosecha, lo recibía con muecas de alegría; el por su parte, entre la algarabía de los circundantes, prosiguió la búsqueda con profunda desesperación, aunque el resultado totalmente negativo. Por ello, derrotado, termino ahogando en dicha soledad, hasta que luego, ya muy ebrio, lo sorprendió la muerte.

Leyenda Los Pétalos de la Rodocrosia.

Tras largos días y noches de andar, el Chasqui alcanzó el último tramo del camino que conducía a la morada del Rey Inca. Llevaba una singular ofrenda destinada al gobernante: tres gotas de sangre petrificadas, el precioso hallazgo fue recibido con mucha emotividad.
En el Lago Titicaca, en tiempos pasados, se había construido el templo de las Acllas: las vírgenes sacerdotisas del Inti. En ese sitio se encontraban anualmente el sol y la luna para fecundar los sembrados y asistir a la sagrada elección de quien heredaría la responsabilidad de perpetuar la sangre inca. Un día el invencible guerrero Tupac Canqui se atrevió a ingresar al sagrado templo, desafiando la tradición incaica. Desde el momento en que descubrió a la bella Ñusta Aclla, nació su amor por ella. La sacerdotisa lo correspondió, consciente de ignorar las restricciones del Tawantinsuyo para las elegidas. Juntos, escaparon hacia el sur, buscando proteger el vientre de la Aclla lleno de vida. El poder imperial bramó y destinó infortunados grupos armados a castigar a los culpables de la transgresión. Tupac Canquí y la Ñusta Aclla se instalaron cerca del salar de Pipando, donde tuvieron muchos hijos descendientes de los Aymarás, que fundaron el pueblo Diaguita.
Sin embargo, jamás lograron deshacerse del hechizo de los Shamanes incas. Ella falleció y su cuerpo fue sepultado en la alta cumbre de la montaña, él murió poco tiempo después, ahogado en su triste soledad. Una tarde, el Chasqui Andalgalá descubrió la tumba de la Ñusta Aclla impresionado por ver cómo florecía, en pétalos de sangre, la piedra que la cubría. Rápidamente salió del estupor y arrancó una de las rosas para ofrendar al Rey Inca. El jefe del imperio, aceptando con emoción la Flor de la Rodocrosita, perdonó a aquellos antiguos amantes furtivos. En adelante, las princesas de Tiahuanaco lucieron con orgullo trozos de la piedra rosa del inca, símbolo de paz, perdón y amor profundo. 

INCAS


Ubicación geográfica.


El imperio inca fue el más extenso de América y uno de los más antiguos, este abarco casi todo el occidente de Sudamérica. Abarcando parte de las actuales republicas de Colombia, ecuador, Perú, Bolivia, Chile y  Argentina, poseían aproximadamente 9.000 km  en el océano pacifico.

Sus límites eran:
Norte: se extendían hasta el río ancasmayo al norte de la actual ciudad de pasto (Colombia), en ecuador llegaron hasta una zona que incluye las ciudades actuales de quito, guyaquíl, manta, esmeraldas y ambato.
Noreste: se extendían hasta la selva amazónica de las actuales republicas de Perú y Bolivia. Se sabe ciertamente que dominaban las actuales ciudades de potosí, Oruro, la paz y prácticamente toda la sierra peruana.
Sureste: llego a cruzar la cordillera de los andes llegando a lo que hoy se conoce como las ciudades de salta y Tucumán en argentina que abarcan las actuales provincias de la rioja, Catamarca, Tucumán, salta y Jujuy
Sur: existen pruebas de que los incas llegaron a abarcar hasta el desierto de atacama haciendo dominio, pero avanzo hasta el rio Maule (chile).
Oeste: el imperio inca limitaba hasta el océano pacifico y hay  quienes postulan que los incas llegaron 
a mantener una cierta relación comercial con algún pueblo de la lejana polinesia (Oceanía).




Vestimenta.

De la misma manera, así como el tipo de ropa utilizada determinaba el origen del inca, también existían un conjunto de elementos que los unificaba: el derecho a llevar uncu , chullu (túnica masculina) y demás adornos que lo identificaban como grupo. Esta metodología se conservó hasta la llegada de los españoles, quienes intentaron unificar, aún más, la vestimenta local, entendiendo que ésta era una sola a lo largo y ancho de todo el imperio.
Los materiales básicos eran el algodón y la lana, en sus diferentes variantes, alpaca y vicuña. La primera de mayor simpleza y la segunda, destinada a las clases más altas. . Los tejidos eran decorados por bordadores especializados; los motivos consistían en formas geométricas e imágenes de animales y seres humanos. A menudo, con este tipo de telas de tapicería se confeccionaban vestidos.
Las mujeres vestían de manera sencilla. Lo que las diferenciaba a una de otras según su clase, no era la complejidad en la confección sino la calidad de los géneros con que estaban fabricados los vestidos. La ropa típica era una túnica rectangular que se colocaba por la cabeza, ancha, que se ceñía a la cintura con un lazo y cuya extensión llegaba hasta los tobillos. Sobre el vestido, llevaban una capa tejida de alpaca. Las damas de la nobleza tenían el privilegio de llevar telas más sofisticadas y coloridas, como así también capas de vicuña.
En cuanto al peinado, las mujeres lo usaban con una ralla al medio y muy largo. Los peinados iban cubiertos con un pequeño manto llamado ñañaca o pancpacuna.
En relación con la vestimenta masculina, los hombres comunes usaban una especie de poncho llamado onka que, normalmente, era tejido en alpaca. Encima de esta prenda, y en los días de frío, usaban una capa, también tejida, que se llamaba yacolla.
A ésta indumentaria se sumaba un taparrabo, el wara cicoy, entre las piernas. Para las clases altas cobraba especial significación, la virilidad del portador.
Los hombres también llevaban accesorios, que variaban según el rango y la ocasión en que eran usados: peines elaborados con espinas, madera, orejeras y alfileres de cobre, plata y oro.
 

Desarrollo tecnológico. 

  • Sistemas de Regadío – Andenes: desarrollaron un sistema de riego para conquistar las dificultades ambientales que les enfrentaron. Los Andes, una región de laderas empinadas y tierra inadecuada para la agricultura. Para conquistar estas condiciones difíciles, los Inca hicieron unas terrazas a lo largo de las montañas. Para regar sus cosechas, cambiaron la ruta de los ríos para prever canales para las terrazas. Esta innovación fue tan exitosa que muchas de aquellas terrazas todavía existen y están en uso hoy.
  • Orfebrería: La dedicación mostrada hacia la albañería de piedras también se ve en la escultura Inca. Moldearon y tallaron en gran escala, produciendo edificios como el sagrado Templo del Sol en Cuzco, pero también realizaron muchas obras más pequeñas. De plata o de oro, estas figuras solían ser vestidas completamente, casi cubriendo totalmente el metal precioso. Tanto como sus creencias en las piedras, los Incas creían que el uso de metales era un factor muy importante.
  • Textilería: El tejido era otro arte con mucho significado para los Inca. Semejante a su gobierno, los tejidos eran muy bien organizados. Usando diseños geométricos y colores brillantes como decoración, los tejidos valían mucho.
  • En matemáticas poseían un sistema de pesos y balanzas de plata, medidas de longitud de superficies y de volumen  arregladas con la mayor exactitud, de las cuales se han descubierto algunos ejemplares en los sepulcros.
  • Caminos: Las rutas eran largas y rectas; por lo común estaban pavimentadas o bien empedradas. Estas redes llegaban hasta los límites del imperio. En los desiertos, el camino se marcaba solo con postes. En las regiones altas, los caminos subían y bajaban constantemente por las laderas de las montañas, en algunos tramos demasiado empinados, se construían escalones para ser el paso más fácil. En los valles se levantaban muros bordeando las rutas y se acostumbraban a decorarlos con pinturas.
  • Calendario: El calendario incaico se basaba en los cambios de las estaciones y en los movimientos de las estrellas. El emperador Pachacuti hizo construir unas torres en las colinas que rodeaban el Cuzco para que la gente, observando la altura del sol entre las torres, supiera cual era el tiempo correcto para sembrar su cultivo.

    Para los campesinos el año comenzaba con la siembra, pero según el calendario oficial, el año se iniciaba el 21 de Diciembre, día en que se celebraba uno de los grandes festivales
    dedicados al Sol.















Arquitectura.

La piedra era el material más importante para construir las estructuras de los Inca, pero también tenía otro gran significado. La piedra fue muy importante en la historia de la creación de los Inca. Dentro de la piedra vivía el espíritu o poder que tenía la capacidad de convertirse en hombre o vice versa. Por esta razón los Inca adoraban las piedras y apreciaban la sustancia actual en vez de lo que so podría construir con piedras. Por ejemplo, "huacas" o piedras sagradas aparecen en la historia de la creación. Cuando todos los hermanos de Manco Capac se convirtieron en piedras, los restos eran considerados como huacas. Aya Auca, el tercer hermano de Capac fue renombrado Cuzco Huaca y fue él, el que cuidaba el campo de Cuzco. También, durante la guerra contra los enemigos de los Inca, conocidos como "Chanca," uno de los gobernadores más poderosos del imperio, Pachacutec, rezó a los dioses, y las piedras se transformaron en una fuerza de soldados y que derrotaron a los Chanca.
Este respeto por la piedra y sus poderes dio lugar a su dominio y pericia con la albañilería. Usaban piedras de tamaños inusuales y las pegaban sin ningún pegamento para hacer paredes; las piedras estaban tan bien situadas que una hoja de papel no se podía poner entre estas. La superficie era tallada lisa y sin ángulos rectos para que parecieran que estaban vivas.




Ejemplos:
Machu Picchu, "La ciudad perdida de los Inca." Esta antigua ciudad está situada encima de una montaña de 8.000 pies de altura, y está prácticamente en la forma que estaba cuando vivían allí los Inca.








Otro ejemplo de la aptitud que tenían los Inca con piedras es Sacsahuaman. Los Inca describieron Cuzco como un puma o un león de las montañas con Sacsahuaman como su cabeza. La antigua fortaleza en Cuzco era posiblemente un almacén que contenía cosas como armas, ropa, y grandes cantidades de joyas, oro y plata.




Escritura.

 Los incas tuvierón varios tipos de escritura destacando los siguientes:
Los Quipus era un sistema de escritura y contabilidad. Es decir no solo servía para registrar cantidades o para hacer operaciones matemáticas (como un ábaco) sino también para registrar hechos e historias es decir eran como libros que solo los iniciados podian escribir y leer en esos quipus. Eran los Quipucamayocs, que estaban al servicio de la Administración del imperio
Los QUIPUS (se pronuncia kipus) era un sistema de registro de información numérico y mnemotécnico creado por los Incas, antiguos pobladores de América del Sur (Perú, Ecuador, Bolivia y parte de Colombia, Chile y Argentina). El quipu constaba de un cordel horizontal del cual pendían varias cuerdas delgadas trenzadas. Estas eran de diferentes tamaños y en ellas se habían ejecutado grupos de nudos situados a intervalos distintos.
Cada cuerda vertical estaba dividida en zonas y de acuerdo a la altura en la cuerda, la zona representaba unidades, decenas, centenas, etc. Por ejemplo, para representar el número 304, la cuerda llevaba 4 nudos en el extremo inferior, dejaba la zona inmediata superior sin nudos y la superior a esta, con tres nudos. Como se ve, utilizaban el sistema decimal. El color de la cuerda indicaba de que se trataba la cantidad registrada.


Producción literaria.

Antes de la conquista española existía una rica y variada literatura oral en el área del Imperio inca. Algunas muestras de poesía religiosa, narraciones y leyendas quechuas han llegado a nosotros gracias a que fueron transcritas por cronistas como Cristóbal de Molina, el Cuzqueño, autor de Fábulas y ritos de los incas (1573); Santa Cruz Pachacuti, indio evangelizado defensor de la Corona española, que escribió la Relación de antigüedades de este reino del Perú (1613), donde describe la religión y filosofía quechuas y recoge en lengua quechua algunos poemas de la tradición oral; el Inca Garcilaso de la Vega (1539-1616); y Felipe Guamán Poma de Ayala cuya obra Nueva crónica y buen gobierno permite reconstruir buena parte de la historia y genealogía de los incas, así como numerosos aspectos de la sociedad peruana posterior a la conquista. No existen registros escritos de sus textos literarios, sino existen  relatos que pertenecen a su tradición oral y que fueron transcriptos por los conquistadores españoles y sus cronistas.
Gracias a ellos y a otros cronistas del siglo XVII, una parte de este legado pervivió y es una fuente viva para la literatura posterior. Esa labor fue continuada mucho después por antropólogos, historiadores e investigadores modernos y contemporáneos; en este siglo, uno de los más influyentes es José María Arguedas, importante también por su obra novelística, que subraya la importancia del carácter bilingüe y multicultural del Perú.
  • Una delas leyendas que podemos encontrar es la de Ollantay u Ollántay que es un drama escrito originalmente en quechua clásico, considerado por unos como de origen incaico y como tal la más antigua y rotunda expresión de la literatura quechua; y por otros como de origen hispano colonial. El más antiguo manuscrito de esta obra perteneció al sacerdote Antonio Valdés (siglo XVIII), a quien por algún tiempo se consideró su autor original; pero existen otros manuscritos divergentes que han hecho pensar en la existencia de una fuente común, de más remoto origen. La posición más aceptada actualmente es que la historia contada en el drama es de origen incaico, que fue conservada durante mucho tiempo como tradición oral, hasta que en la época colonial fue adaptada para su escenificación teatral según el molde occidental, aunque continúa en el anonimato el autor o autores de tal adaptación. Fue publicado por primera vez en 1857, por Johann Jakob von Tschudi, en quechua y alemán. La primera versión en castellano apareció en Lima, en 1868, publicada por José Sebastián Barranca y subtitulada Los rigores de un padre y la generosidad de un rey; desde entonces ha aparecido distintas versiones en diversos idiomas.




AZTECAS


Ubicación geográfica.


Los aztecas establecieron México-Tenochtitlan en el centro del Valle de México, expandiendo su control hacia ciudades-estado ubicadas en los actuales estados de México, Veracruz, Puebla, Oaxaca, Guerrero, la costa de Chiapas, Estado de Hidalgo, y parte de Guatemala.





 Vestimenta.


Representativa de la función social o estatus, la vestimenta de los aztecas representó su compleja estructura social.


 Si bien hay características que se repiten en la mayoría de las culturas precolombinas, esto es, uso de pieles de animales en el comienzo, elaboración de pigmentos vegetales para teñir las prendas, fabricación de tejidos mediante telar, tarea reservada a las mujeres, el uso de plumas y oro para los nobles o el emperador, los aztecas se destacaron por la diversidad de su vestuario y el colorido que presentaban.
En la base de esta sociedad jerarquizada estaban los guerreros, ocupados de cuidar tanto al pueblo como al emperador y sacerdotes, ubicados en la cima de la sociedad, y las arcas de la organización de la que vivía toda la población. Los trajes se diferenciaban según los méritos en campaña, caracterizados por complejos tocados, adornos de oro y conchas.
Las mujeres llevaban el huipil y quechquemitl, camisola, una falda debajo, y mantilla, respectivamente. Los pigmentos para teñir los géneros eran de origen natural, el índigo, por ejemplo, provenía de una planta indigófera y el rojo o púrpura se extraía de un tipo de caracol.
Los hombres usaban el maxtle o taparrabo, una tira de algodón que pasaba por las ingles, enlazándose a la cintura y una especie de sandalia llamada cactli que sólo tenían talonera y tiras para ser anudadas a la pantorrilla.




Desarrollo tecnológico.


 Su gran avance tecnológico les permitió construir toda la ciudad sobre un lago, con sólo tres calzadas comunicándolo con tierra firme. Construyeron tramos rectangulares y con espacios para permitir el paso de las trajineras y canoas en los canales. Entre los tramos de calzadas se colocaban plataformas de madera que se elevaban para dar paso a las embarcaciones. Al elevarlos, estos puentes también se convertían en una defensa y una barrera protectora.
·       Calendarios: Conocían los aztecas el año solar --además del venusino--, representándolo en un calendario llamado xíhuitl, integrado por 18 meses de 20 días cada uno, más 5 días nefastos llamados nemontemi. El Tonalpohualli era un calendario de 260 días, resultado de la combinación de 20 signos con 13 numerales; este calendario era la "cuenta adivinatoria de los días", y permitía saber la suerte de quienes nacían en ellos, servía también para nombrar los años y fijaba las fechas de las fiestas movibles.
Cada 52 años (siglo) coincidían ambos calendarios y se celebraba la fiesta del Fuego Nuevo.
·       Numeración: El sistema numérico empleado era vigesimal, es decir, contaban por veintenas. Los números del 1 al 19 se representaban con puntos. El 5 solía representarse con una mano. El número 20 era representado con una bandera, repitiéndola para representar cantidades mayores. 400 se representaba con una pluma y 8000 con una bolsa o costal. Así, para obtener distintas cifras, se agrupaban o combinaban puntos, rayas, banderas, bolsas.
·        La industria textil, la cual tenía entre sus principales productos la fabricación de tejidos de algodón y fibra.
·        Conseguían obsidiana (llamada a veces vidrio volcánico, es una roca ígnea volcánica ) de la Sierra Madre Sur y Occidental para elaborar armas y objetos cotidianos (cuchillos, platos, collares).



Arquitectura.


La arquitectura azteca refleja los valores y la civilización de un imperio, y elestudio de su arquitectura es decisivo para llegar a entender la historia de los aztecas, incluyendo su migración a través de México y su representación de los rituales religiosos. La mejor manera de describir la arquitectura azteca es diciendo que es monumental. Su propósito radicaba en manifestar poder, al tiempo que se apegaba a fuertes creencias religiosas. Esto se pone en evidencia en el diseño de los templos, los adoratorios, los palacios, y las casas de la gente común. Tenochtitlan era una ciudad abrumadora y monumental, que fue construida sobre pequeñas islas y tierras pantanosas. 
Era la tercera ciudad más grande del mundo, después de Constantinopla y París, y en su época de mayor esplendor albergó a 200,000 habitantes. Tenochtitlán era la ciudad en la que se encontraba la arquitectura azteca más impresionante y monumental.
Los aztecas estaban bien organizados y contaban con fuertes infraestructuras y sistemas que movilizaban personas y recursos materiales a fin de construir grandes edificios que satisficieran las necesidades de la población. Tenochtitlan, la ciudad capital, simbolizaba el poderío azteca. 

La arquitectura azteca, que era similar a la de otras culturas mesoamericanas, poseía un innato sentido del orden y la simetría. Los diseños geométricos y las líneas amplias eran representaciones del dogma religioso y del poder del Estado. 
Además, los aztecas utilizaron bajorrelieves, muros, plazas, y plataformas, como medios para representar a sus dioses e ideales. Durante las distintas épocas de su imperio, los aztecas fueron agregando nuevas técnicas y materiales a sus estructuras. Ejemplos de la monumentalidad y la grandiosidad aztecas se hacen evidentes en el Templo Mayor, cuya plaza podía albergar a 8.000 personas, y en el mercado de Tlatelolco, con una capacidad para 20.000 personas durante los días de mercado. 





Escritura.



Originalmente se trataba de una escritura pictográfica con rasgos silábicos o fonéticos tipo rebus. Este sistema de escritura fue adecuado para mantener registros tales como genealogías, información astronómica y listas de tributos, pero no representaba el vocabulario total de la lengua hablada de la forma en que los sistemas de escritura del "viejo mundo" o la escritura maya podían hacerlo. Los códices fueron esencialmente ayudas pictográficas para enseñar largos textos que eran memorizados por los sabios nahuas.

La literatura Azteca.



Muchos de los registros literarios de los aztecas fueron destruidos por los europeos; sin embargo, varios relatos lograron trascender en el tiempo a través de la tradición oral y por medio de los misioneros.
Los poemas aztecas, llamados cuicatl que  son los cantos, himnos y poemas rítmicamente estructurados, sujetos reglas de medida y acentuación. Sus textos solían presentar una significación religiosa e incluían historias sobre la vida y la muerte
Entre sus poesías se encuentra  la peosia en lengua Nágualt. Y los Tlahtolli.
Náhuatl.
La palabra náhuatl deriva de nāhua-tl (“sonido claro o agradable”) y tlahtōl-li (“lengua”, “lenguaje”). Se trata de una lengua uto-azteca que se habla en Centroamérica y en México, donde constituye la lengua nativa con mayor número de hablantes (aproximadamente un millón y medio).
El náhuatl tiene una gran importancia histórica, ya que se utilizó como lingua franca en el Imperio Azteca desde el siglo XIII hasta su caída (1521). Incluso tiempo después fue aprovechado por los europeos con fines de conquista.
La actividad poética en náhuatl era conocida como in xóchitl, in cuícatl (“flor y canto”). De esta forma, la poesía náhuatl se presentaba con un diálogo con lo divino, con el mundo y con el pueblo. Los principales referentes poéticos de dicha sociedad eran los monarcas y los sacerdotes.
Aunque las historias y los cantos solían ser aprendidos de memoria por los pobladores, se utilizaban grandes carteles con diseños y signos fonéticos que permitían al sacerdote señalar cómo debía entonarse cada poema en los rituales.
La poesía náhuatl contaba con composiciones de distintos géneros: los Teotlatolli, que se centraban en el origen del mundo y el universo divino; los Teocuícatl, que eran himnos dedicados a los dioses; los Xopancuícatl, cantos a la alegría y la belleza; los Xochicuícatl, que exaltaban la amistad y la nobleza; los Yaocuícatl, con referencias heroicas y guerreras; y los Icnocuícatl, que expresaban angustia, tristeza y reflexiones sobre la muerte.
Nezahualcóyotl (1402-1472), monarca de la ciudad-estado de Tetzcuco, fue uno de los autores más reconocidos de la poesía náhuatl.
Estos son algunos ejemplos de la poesía náhuatl:
Me siento fuera de sentido,
lloro, me aflijo y pienso,
digo y recuerdo:
¡Oh, si nunca yo muriera,
si nunca desapareciera!…
¡Vaya yo donde no hay muerte,
donde se alcanza victoria!
Oh, si nunca yo muriera,
si nunca desapareciera.
(“Sed de inmortalidad”, de Nezahualcóyotl)
Amo el canto de cenzontle
pájaro de cuatrocientas voces,
amo el color del jade
y el enervante perfume de las flores,
pero más amo a mi hermano: el hombre.
(“Mi hermano, el hombre”, de Nezahualcóyotl)

Ruego en flores
¡Oh Tú por quien todo vive!: alzamos a Ti el ruego:
ante Ti nos rendimos para complacerte,
junto a los floridos tambores,
Señor del palacio de las aguas:
¡Se reponen ya los tambores,
se guardan en la casa de las flores!
¡Ya te dan culto tus amigos,
Yaomatzin, Micohuatzin, Ayocuauhtzin:
ya con flores a ti suspiran los príncipes!

El tlahtolli
Aunque se acepta la poesía, la manifestación inicial de toda cultura, poco a poco fue surgiendo la prosa, aunque su producción fue mucho menor de número.
En las culturas indígenas americanas también se encontraron, primeramente, textos poéticos, y, posteriormente, textos prosificados de muy diversa índole; los aztecas les dieron el nombre genérico de “tlahtolli”.
León Portilla considera que los “tlahtolli” se conformarán de narrativa, discursos, descripciones y relaciones históricas. De estas redacciones las que han quedado en la memoria popular son los “huehuehtlahtolli”.